Ya lo he escrito otras veces, y es que yo comencé a navegar en crucero donde los compases vienen puestos de fábrica, y ahora navegando en láser pues lo hecho de menos, bastante. Como soy torpe, me cuesta ver los roles. Me sorprende la facilidad con la que mucha gente es capaz de darse cuenta de la mínima variación en la direción del viento y decidir si hay que virar o no. Navegando en las Rías Gallegas, que suelen tener tierra en la que tomar referencias casi en los 360º muchos dicen que el compás no es necesario, pero a mi el leer un número en un compás me cuesta menos que tomar una marca en tierra, recordar un tiempo después cual era la marca y ver como ha variado para saber si debo aguantar el bordo o virar.
Los compases de 0º a 360º pueden valer, pero creo que usando un táctico las cuentas son más fáciles y con la práctica no hace falta ni pensar. Este artículo que traduzo ahora está firmado por Steve Cockerill y se ha publicado en la página de Rooster Sailing. Por cierto yo todavía no me he comprado un compás ;)
USANDO UN COMPAS - Steve Cockerill´.
USANDO UN COMPAS - Steve Cockerill´.
Si cada vez que salimos al campo de regata, el viento fuese estable y el recorrido estuviese perfectamente montado, entonces no habría necesidad de un compas. Sin embargo, la realidad es otra. El misterioso arte de leer los roles usando los barcos que te rodean y el ángulo de las olas puede volverse muy confuso en el fragor de la competición, pero puede ser solventado usando un compás. El compás puede ser una herramienta muy útil para determinar el lado favorable de la línea, la estrategia en la ceñida, o un indicador de la tendendia en los cambios en la direccion del viento, pero aun mas importante indica los roles tanto en ceñida como en la popa. No estoy diciendo que me quede mirando al mio, esperando a que prediga el siguiente role, pero me aporta valiosa información durante todo el recorrido:
Justo después de la salida - Estoy en el bordo malo, debo virar.
Al pasar la boya de sotavento - Estoy en el bordo bueno, espera, se paciente.
Justo después de la salida - Estoy en el bordo malo, debo virar.
Al pasar la boya de sotavento - Estoy en el bordo bueno, espera, se paciente.
Veo toda la flota a través de mi ventana en la vela - hay un role a mi favor de 30º - Debería virar ya para ponerme en frente de la flota, antes de que llegue el siguiente role.
Según mi experiencia hay muchas formas de considerar la velocidad en una regata:
Primero está la velocidad a la que el barco avanza.
Después tenemos el VMG, o la "velocidad hecha buena" - velocidad con la que avanza el barco en la dirección del viento, que nos indica nuestra nuestra capacidad tanto ceñida como en popa, haciéndonos ver cuan "alto" o "bajo"* podemos navegar, antes de que esa "altura" o "profundidad"* comprometa la velocidad con que el barco avanza.
*Nota del traductor: La altura y profundidad se refieren a cuanto somos capaces de navegar tanto en ceñida como en popa. Navegar más alto o más orzado en popas, crea más viento aparente y el barco camina más, sin enbargo el rumbo hacia sotavento es peor.
*Nota del traductor: La altura y profundidad se refieren a cuanto somos capaces de navegar tanto en ceñida como en popa. Navegar más alto o más orzado en popas, crea más viento aparente y el barco camina más, sin enbargo el rumbo hacia sotavento es peor.
También existe la "velocidad sobre el recorrido" que es la habilidad de usar la velocidad VMG para sacar partido con el objetivo de llegar a la próxima boya, navegando siempre en los bordos buenos y no en los malos. Es un juego de números!.
Me gusta contar la historia e la primera regata de entrenamiento en los Campeonatos Nacionales de Laser en Torbay, en el 93. Salí 30 segundos tarde, inseguro acerca de mi velocidad y necesitado de un refuerzo de mi confianza. Ignoré a los otros barcos y viré cuando mi compás me lo indicaba, cogiendo los 7 roles hasta la primera boya. La mitad de la flota estaba en el bordo bueno en el primer role, un cuarto de la flota en el siguiente, un octavo en en el posterior, así hasta que me dí cuenta que estaba octavo en la primera boya, muy satisfecho de comprobar que navegar en Láser es como cualquier otra clase, coge los bordos buenos siempre y contarás con un buen resultado al final de la regata. En ningún momento comparé mi velocidad con la de nadie, ni siquiera pensé contra quien estaba navegando, fue solo cuestión de matemáticas. No era todavía un laserista rápido, pero podía hacer navegar el barco en la dirección correcta. La mejor manera de ver la estrategia en nuestro deporte es con un compás. Fundamentalmente nos debería indicar si estamos en un role bueno (navegando en un rumbo más cercano al rumbo a boya que antes) o malo (navegando mas alejado del rumbo a la boya que antes). Antes de empezar a ver como la información se presenta en el compás, quizás deberíamos considerar la importancia de los roles y como afectan a los barcos.
El diagrama 1 muestra como el barco A navega una distancia menor que el B.
Imagen retirada de http://www.roostersailing.com/
Una explicacion matemática que muestra como un role de 10 grados afecta a dos barcos que navegan separados por 100 m, se puede ver en el diagrama 2.
Imagen retirada de http://www.roostersailing.com/
Considremos que L y R tienen un ángulo de virada igual entre ellos y de 90 grados, que sus velocidades son iguales y que los separa una distancia de 100 m. El triángulo dibujado en línea continua muestra que si L vira (y no pierde distancia al hacerlo), deberá navegar la distancia X, mientras que R navegará la distancia Y hasta encontrarse con L en el vértice del triángulo. En el triángulo dibujado con línea discontinua el viento ha rolado 10 grados a la izquierda. Se puede ver entonces que los lados del trángulo discontinuo X' e Y' son ahora distintos, siendo Y' más grande y por tanto R recorrerá más distancia. Restando X' a Y' podemos saber la ventaja que le sacará L a R.
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